Nuestra Historia
Acqua delle Langhe nace de las sugerencias irrepetibles de una tierra extraordinaria y seductora considerada desde 2014 Patrimonio de la Unesco y exportadora en todo el mundo de inconfundibles excelencias vinícolas. Es de aquí, de los perfumados viñedos y de los terrenos salinos de este increíble oasis natural inmerso en el Piamonte más noble y laborioso, que se mueve el recorrido de Alberto Avetta, creador del proyecto Acqua delle Langhe y de todas las líneas de producto. Él siempre ha tenido la pasión por los perfumes. Con determinación y un poco de audacia en 2012 fundó la empresa y registró la marca Acqua delle Langhe, creando las primeras tres fragancias Cannubi, Arborina, Villero.
La elección del término Agua representa un desafío en el que la simplicidad de la palabra resalta las fragancias. El agua, elemento esencial y primordial, fuente de vida, una vez cubrió totalmente las Langhe. Era agua de mar. Precisamente el mar, liberando minerales y oligoelementos preciosos, indispensables para la tierra, le ha conferido fertilidad y riqueza, dándole esa particular tonalidad tenue, clara y brillante propia de la arena de las playas más bellas del planeta.